Puede que hayas pasado por algo que te ha lastimado, puede ser una enfermedad física o un trastorno psicológico, un evento traumatizante o un duelo difícil de superar, cualquiera de estos u otros motivos nos llevarán a la necesidad de recuperarnos. Anteriormente hice una entrada sobre 100 razones para recuperarte, y ahora me gustaría seguir con algunas recomendaciones, metas y consejos para lograrlo.
- La mala noticia primero? Nada dura para siempre. La buena noticia? Nada dura para siempre.
- Recuperarse puede significar muchas cosas: Llorar toda la noche, hace ejercicio, platicar con tus amistades, golpear una almohada... Lo que importa es que sea acciones que no te lastimen y te ayuden a cuidarte a ti mismo.
- Cada persona necesita diferente cantidad de tiempo para recuperarse, no te compares.
- Una serie de días malos no significa que todo irá mal.
- Eres lo que eres hoy, lo que pasó ayer, hace dos semanas, hace 5 años no te define ahora ni tu futuro.
- Deja ir la necesidad de estar en control, de impresionar a otros, de resistir al cambio.
- No escuches a aquellas personas que digan que tus problemas no son reales o que hay problemas más importantes, es tu lucha y es tu vida, y eso es lo más importante.
- Procura un ambiente saludable rodeándote de personas positivas, de lugares bonitos y limpios (esto incluye tu habitación!), y de experiencias. Busca eventos culturales y actividades en tu ciudad en las que puedas participar para mantener tu cuerpo y mente estimulados de una manera positiva.
- Busca grupos de ayuda, pueden ser en tu ciudad, en internet o redes sociales (hay muchos en tumblr!), escuchar frases, experiencias y consejos positivos de personas que están recuperándose de algo similar puede hacer tu proceso más llevadero.
- Mejora tu dieta y haz actividad física, la salud de tu cuerpo esta en relación con tu salud mental, haz los cambios que puedas hacer, hazlos progresivamente, si necesitas ayuda acude con profesionales.
- Identifica, si es necesario haz una lista, de aquellas cosas que detonan tus recaídas (triggers), pueden ser imágenes, películas, lugares, noticias, incluso palabras... Planea como evitarlos o qué hacer si te topas con ellos. Si tienes confianza, comparte la lista o platica sobre ellos con tus seres queridos.
- Conoce tus signos de alarma y pide ayuda: Llorar sin motivo, aislarte, dejar de comer, faltar a la escuela... Cada persona tiene sus propios signos.
- Una recaída o un ataque no borra tu progreso.
- Las personas que saben expresar gratitud tienen una mayor capacidad para manejar el estrés y tienen más emociones positivas; agradece las atenciones de amigos y familiares, los regalos o los cumplidos, haz una lista de las cosas que te hacen sentir afortunado, y consiéntete a ti mismo cuando hayas logrado una meta.
- Repite conmigo: Cada día mejoro, cada día sano, cada día es un día más cercano a mi recuperación.